El líder islamista pidió “detener a Israel”
En las últimas horas, el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, se reunió en Astaná con su homólogo ruso, Vladímir Putin.
Durante este encuentro, el líder islamista se refirió al conflicto palestino-israelí, afirmando que las acciones de Israel contra Palestina y sus amenazas hacia el Líbano representan una amenaza para la paz regional y global.
Según la oficina de presidencia de Turquía, Erdogan enfatizó que la escalada de los conflictos causaría un daño significativo a los países de la región. En ese sentido, instó a la comunidad internacional a centrarse en “detener a Israel”.
El contexto de estas declaraciones se remonta al ataque coordinado por Hamás contra Israel el 7 de octubre, que resultó en unos 1.200 muertos, 5.500 heridos y 253 rehenes israelíes, de los cuales cerca de 100 fueron posteriormente liberados en intercambios de prisioneros.
En respuesta, Israel declaró la guerra a Hamás e inició una campaña de bombardeos sobre Gaza, que ha causado más de 37.900 muertes palestinas y más de 87.200 heridos hasta la fecha.
Desde el inicio del conflicto, Erdogan ha calificado de “psicópata”, “carnicero” y “genocida” al primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu.
Por su parte, tanto Netanyahu como otras políticos israelíes le han recordado al mandatario turco sus políticas de persecución contra los kurdos, así como la represión estatal contra periodistas y ciudadanos disidentes turcos.
Rusia y otros países están instando a Israel y Hamás a acordar un alto el fuego. La mayoría de estas naciones abogan por una solución de dos Estados, aprobada por la ONU en 1947, como la única vía para lograr una paz duradera en la región.













