A la crisis energética se suma la crisis hídrica en Irán
A última hora del jueves, en el suroeste de Irán marcharon miles de manifestantes protestando por la escasez de agua que afecta al país. La policía del régimen abrió fuego para dispersar a la multitud, según se puede ver en videos que circulan en la web.
Los videos muestran a grupos de ciudadanos bloqueando las calles y prendiendo fuego neumáticos en señal de ira. Por su parte, los policías antidisturbios se enfrentaban a los manifestantes. En un video se pudo ver oficiales de la policía disparando escopetas, aunque no se llegó a comprobar si se trataba de balas de plomo o de goma.
Los protestantes coreaban en árabe y pedían a los demás que se unieran a sus reclamos. La provincia está habitada por una cantidad considerable de árabes, quienes suelen quejarse de la discriminación del régimen teocrático iraní.
La población árabe se siente segregada por el régimen teocrático
Los árabes separatistas llevan mucho tiempo realizando operaciones en Khuzestan, región de la que Saddam Hussein quiso apoderarse durante la guerra de los años 80 con Irán. En el pasado han volado oleoductos y han sido acusado de varios ataques, entre ellos un atentado en 2018 a un desfile militar en el que 25 personas murieron en Ahvaz.
El drama de la falta de agua ha arrojado a las personas a las calles a manifestarse de manera furiosa contra el régimen. A esta crisis hídrica hay que sumarle los cortes de electricidad masivos que está sufriendo la población iraní, y que también ha provocado su ira en las principales ciudades de la República Islámica.
En el último año las lluvias han disminuido a casi un 50%, dejando a las presas con un cada vez más escaso suministro de agua para abastecer al país.
