Irán y su guerra declarada a los activistas de derechos humanos
La Unión Europea le ha pedido a Irán que revea el caso de una activista de derechos humanos condenada a 80 latigazos y 30 meses de prisión, acusada por el régimen de protestar en contra de la muerte de manifestantes que participaron en los disturbios del 2019.
Un portavoz de la entidad instó a la República Islámica a revisar el caso de Narges Mohammadi, quien se encuentra en un delicado estado de salud.
Mohammadi habló de su sentencia en un post de Instagram y aclaró que no “acepta ninguna de estas sentencias”.
La Unión Europea enfatizó que “la condena reciente a la señora Narges Mohammadi, defensora iraní de los derechos humanos, a una pena de flagelación y prisión es un hecho preocupante“.
Imputada por “bailar en la cárcel”
La activista mencionó en la publicación de Instagram que se le imputa, entre otros cargos, celebrar una fiesta y bailar en la cárcel.
En octubre de 2020 salió de la cárcel, luego de pasar ocho años y medio en prisión. Entonces se la había acusado de planificar delitos para dañar la seguridad de Irán, por difundir propaganda en contra del gobierno y por formar y gestionar un grupo ilegal.
Antes de ser encarcelada, Mohammadi fue vicepresidenta del Centro de Defensores de los Derechos Humanos de Irán, una organización prohibida por el régimen. En 2018 fue galardonada por el Premio Andrei Sájarov de ese año.
Discussion about this post