Tensión en la frontera entre Irán y Pakistán
El sábado pasado, se registró un enfrentamiento en la frontera entre Irán y Pakistán en el que perdieron la vida al menos cinco patrulleros iraníes.
Según informes de los medios iraníes, los guardias fronterizos avistaron a un grupo de hombres armados cerca de la frontera en Saravan, ubicada en la provincia de Sistán y Baluchistán, al sureste del país.
Los cinco oficiales fallecieron durante el posterior enfrentamiento con lo que el régimen denomina “grupo terrorista”, el cual tuvo lugar el sábado por la noche. Además, se reportó que otros dos guardias resultaron gravemente heridos y se encuentran en estado crítico.
Aunque no se cuenta con información acerca de la afiliación de los atacantes, varios grupos baluchis de la zona han estado llevando a cabo una insurgencia contra la República Islámica.
Entre ellos, destaca Jaish al-Adl, que ha atacado con frecuencia al ejército iraní, especialmente al Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica (CGRI).
El enfrentamiento del sábado se produce apenas unas semanas después del asesinato a tiros de Alireza Shahraki, jefe de la Policía de Inteligencia de Saravan, a manos de hombres armados no identificados.
El sitio web de noticias de Baluchistán Halvash, informó que Shahraki había empleado métodos “extremadamente violentos” contra los detenidos durante varios años.
En los últimos meses, la situación en Sistán y Baluchistán ha empeorado de manera significativa. Las ciudades de la región están experimentando una gran tensión, especialmente los viernes, cuando los ciudadanos salen a protestar contra el régimen.
Se han registrado numerosos ataques contra fuerzas militares y gubernamentales en la provincia desde la muerte bajo custodia de Mahsa Amini el año pasado, hecho que generó protestas en todo el país.