Catar y su apoyo a grupos terroristas
Los grupos terroristas consiguen financiación de diversas formas. Una de las más eficaces es sirviéndose de las organizaciones no gubernamentales (ONG) para ocultar esta actividad.
Esto sucede en países como Catar, donde Qatar Charity contribuye a la financiación de grupos extremistas. No obstante, esta ONG se presenta como una organización dedicada a proyectos de inversión en educación, igualdad y desarrollo sostenible.
En 2018, el organismo que regula las ONG en el Reino Unido puso en duda la supuesta independencia de Qatar Charity UK. El organismo constató que el 98% de sus ingresos provenían de Qatar Charity (QC) con sede en Doha.
Ante estas sospechas, la filial británica se defendió de manera poco convincente, asegurando que las propuestas de QC habían sido tratadas con el mismo rigor que las donaciones realizadas por otros organismos.
Según se supo, los siete administradores de la sucursal británica eran a su vez directivos o empleados en QC. Al estar tan ligados a la sede central, los administradores se encontraban en una situación de conflictos de intereses, siendo proclives a beneficiar a la matriz. Una vez conocida la noticia, esto los obligó finalmente a tener que renunciar a sus cargos.
Los proyectos sociales de ONG como Qatar Charity son funcionales a los grupos extremistas porque a través de ellos pueden transmitir su fundamentalismo y adoctrinar a sus adeptos.
Estos grupos utilizan a las mezquitas y centros educativos para proteger a miembros de células terroristas cuando necesitan mantenerse alejados de la escena y actuar desde la clandestinidad.
A través de las investigaciones realizadas a Qatar Charity se ha descubierto el vínculo entre la ONG y los Hermanos Musulmanes, una agrupación considerada terrorista por varios países y cuyos principales líderes se encuentran en prisión por sembrar la violencia en distintos países de Medio Oriente.
